Cómo enfriar rápidamente la cerveza

Como cualquier otro alimento elaborado con ingredientes naturales, la cerveza es un producto sensible a los cambios bruscos de temperatura y por ello es preferible bajar su temperatura de forma gradual en el frigorífico antes que hacerlo en el congelador, pero… ¿Quién no se ha visto en la necesidad de enfriar rápidamente unas cervezas para poder degustarlas en pocos minutos?

Llegamos cargados del supermercado y deseosos de recompensar nuestro esfuerzo con una cervecita fresca, pero comprobamos con terror que las únicas que tenemos a mano son las que acabamos de comprar. O llegan a casa unos amigos por sorpresa y nuestra previsión de cervezas en el frigorífico no da para tanta gente. ¿Qué hacemos? 

Hoy vamos a enumerar algunos 'trucos' para salvar esas situaciones puntuales donde nuestra sed o nuestros invitados no pueden esperar el tiempo que llevaría el procedimiento más habitual y recomendable de esperar a que el frigorífico haga su trabajo.

• Truco 1: Hielo, agua y sal > Llenamos un recipiente con abundante hielo, añadimos agua (mejor si está fría) y sal, removemos bien e introducimos nuestras cervezas. Al tener los envases rodeados por el agua, el contacto superficial es mucho mayor que si solo tuviéramos el hielo, acelerando el enfriamiento. Por otro lado, la sal al disolverse absorbe calor, por lo que el agua, y con ella la cerveza, se lo “cederán” y enfriarán antes. Dos consejos para ganar todavía más rapidez: no introducir muchas cervezas al mismo tiempo (cuanto mayor sea la proporción de agua y hielo respecto a la de la cerveza mejor) y utilizar latas en lugar de botellas de vidrio.
• Truco 2: Servilletas húmedas y congelador > Los congeladores modernos pueden enfriar en poco tiempo nuestra cerveza, pero si rodeas las latas o botellas con una servilleta húmeda (puede ser de tela o de papel) conseguirás que esto suceda aún más rápido. En este caso el contacto superficial del tejido humedecido con el envase acelera el enfriamiento que se produciría por el contacto directo del aire del congelador, ahorrando tiempo para tener lista tu cerveza. Una vez más, la lata te aportará un puntito extra de rapidez frente a la botella.

• Truco 3: Enfriado con inmersión de objetos fríos > Cada vez aparecen más utensilios en el mercado cuya función es enfriar rápidamente nuestras cervezas por contacto: cubitos de metal o de vidrio que se sumergen en el vaso de cerveza, tapones con una barra metálica que se introduce en la botella… Obviamente necesitarás tenerlos guardados en el congelador para cuando se presente la ocasión y su efectividad es relativa, además de que a nuestro juicio modifican la experiencia cervecera más de lo deseable.
• Truco 4: Enfriado con 'frigoondas' > Los denominados frigoondas son una especie de microondas que enfría con gran velocidad cualquier líquido o alimento sólido. En el caso de la cerveza sus fabricantes afirman que son capaces de enfriar una lata en 5 minutos. Aceptando que sea así, su precio actual de varios miles de euros todavía los hace prohibitivos para la mayor parte de nuestras economías domésticas. 

Elige la opción que mejor encaje con tus necesidades y vigila para no pasarte de frío; una cerveza casi congelada pierde gran parte de su aroma y sabor y modifica la percepción de su textura.

¡Salud!