EL ORIGEN DE LA CERVEZA

Hoy vamos a emprender un viaje en el tiempo para remontarnos hasta un momento singular en la historia de la humanidad: el origen de la cerveza. Pero antes de partir, y para fijar bien el destino de nuestra aventura, lo primero que debemos hacer es definir a qué tipo de bebida podemos llamar cerveza desde un enfoque más amplio que el de la realidad actual.

En un sentido universal y con esa mirada histórica, podemos decir que la cerveza es una bebida alcohólica elaborada a partir de la fermentación de cereales y aromatizada con plantas, pudiendo tener añadidas frutas y otras fuentes de azúcar.

Teniendo como punto de partida esta definición nos encontramos con un problema para fijar el rumbo de nuestra máquina del tiempo y es que el origen de la cerveza no está unido a una única región del planeta sino que a lo largo de la historia se han elaborado diferentes cervezas en casi todos los continentes, respondiendo cada receta a los ingredientes disponibles en ese lugar: cebada y trigo en Oriente Medio y Europa, mijo y sorgo en África, maíz en América o arroz en Asia.

Tampoco va a ser fácil ajustar el contador del tiempo de nuestra máquina pues hay distintas teorías sobre cuándo se hizo la primera cerveza. Algunos investigadores asocian de manera inseparable la elaboración de la cerveza con la del pan por la similitud de ingredientes y procesos entre ambas, situando así su origen entre los años 10.000 y 6.000 a. C. Sin embargo, por ahora son solo hipótesis, así que apuntaremos unos milenios más cerca en nuestro viaje.

Los primeros vestigios de la elaboración y por tanto del origen de la cerveza nos han llegado a través de la arqueología. En diferentes yacimientos de la región de Mesopotamia han aparecido vasijas de barro fechadas entre el 5.000 y el 4.000 a. C. cuyo análisis demuestra que eran utilizadas para la fermentación de cereales.

Posteriormente y en la misma región aparecen referencias escritas sobre la cerveza, bien como recetas o bien en documentos legales como el Código de Hammurabi.

No lejos de allí ni en el espacio ni en el tiempo, en el Egipto de los faraones, la cerveza alcanzó un esplendor hasta entonces inaudito pues formaba parte del salario de los trabajadores, de la dieta de los ciudadanos y de los rituales religiosos, haciendo de este imperio la primera potencia cervecera mundial de la historia.

Pero como decíamos antes, el origen de la cerveza no se reduce a una sola región del planeta. Solo como ejemplos citaremos que en nuestra península se han hallado restos de bebidas fermentadas a partir de cereal en Can Sadurni (Barcelona) y en el valle de Ambrona (Soria), que en amplias zonas de la América precolombina se elaboraba una bebida conocida como “chicha” a partir de la fermentación del maíz y que en Asia podemos encontrar cervezas de mijo e incluso considerar al Sake como una cerveza elaborada con arroz, según nuestra definición de partida.


El desarrollo del transporte marítimo a partir del siglo XV, junto con el dominio político y mercantil de las grandes potencias europeas, unificó paulatinamente el concepto de cerveza en torno a las que se elaboraban en nuestro continente, en cuyas recetas la cebada, el trigo y el lúpulo eran protagonistas absolutos. Alemanes, belgas, holandeses y británicos, no solo producen y exportan sus cervezas, sino que fundan compañías cerveceras en todos los rincones del planeta y hacen de la cerveza la bebida global por excelencia.

Los avances técnicos aplicados a la elaboración cervecera, especialmente a partir de la Revolución Industrial, han ido perfilando los estilos clásicos hasta la forma en la que hoy los conocemos, permitiéndonos reproducir cualquiera de ellos en cualquier lugar del mundo gracias al control de las levaduras, a la posibilidad de igualar diferentes aguas mediante el ajuste de sus minerales y al control minucioso de cada uno de los procesos.

Por fin de vuelta de nuestro viaje a través del tiempo, es el momento de elegir una cerveza para brindar por el retorno, saborear cada sorbo con placer y comenzar a pensar en el próximo viaje, real o imaginario.

¡Salud!

Julio Cerezo - Beer Sommelier

Director de Sabeer Academia de la Cerveza